Garantía
Si contratas como consumidor y Usuario, te ofrecemos garantías sobre los productos que comercializamos a través de este Sitio Web, en los términos legalmente establecidos para cada tipo de producto, respondiendo, por tanto, por los defectos que se manifiesten en un plazo de seis meses desde la entrega del producto.
Se entiende que los productos son conformes con el contrato siempre que (i) se ajusten a la descripción realizada por nosotros y posean las cualidades que hayamos presentado en este Sitio Web, (ii) sean aptos para los usos a que ordinariamente se destinan los productos del mismo tipo y (iii) presenten la calidad y prestaciones habituales de un producto del mismo tipo que sean fundadamente esperables. En este sentido, si alguno de los productos no fuera conforme con el contrato, tenés que ponerlo en nuestro conocimiento siguiendo el procedimiento detallado en el apartado 20.3 de los Términos y Condiciones y a través de cualquiera de los medios de comunicación previstos al efecto.
Los productos que vendemos, especialmente los productos fabricados a medida, a menudo pueden presentar las características de los materiales naturales que se utilizan en su fabricación. Estas características, tales como variación en la textura y en el color, no tendrán la consideración de defectos o taras. Al contrario, debería contarse con su presencia y apreciarlas. Únicamente seleccionamos los productos de la máxima calidad, pero las características naturales son inevitables y deben ser aceptadas como parte de la apariencia individual del producto.
Respecto a la garantía, se aclara expresamente que:
- Queda sin efecto cuando se han realizado reparaciones o modificaciones a los productos por terceros ajenos a LUZ Buenos Aires.
- No cubre daños sufridos en ocasión del transporte de los productos por medio o personas ajenas a LUZ Buenos Aires.
- No cubre daños ocasionados por la utilización inadecuada, negligencia, accidentes, o el desgaste producido por el uso normal en el transcurso del tiempo: (i) daños causados por accidentes domésticos, daños de agua, quemaduras, cortes, animales u otras formas de uso indebido; (ii) daños debidos a negligencias del consumidor o a limpieza; (iii) daños causados por materiales corrosivos, como ácidos o disolventes, tintes, tinta, pintura o líquidos fisiológicos humanos o animales; (iv) daños producidos por la exposición directa a la luz del sol o artificial y/o a fuentes de calor, y condiciones similares, con su consiguientes descoloramiento/resequedad; y/o (v) daños producidos por el abuso, uso indebido o causas de fuerza mayor.
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